
En realidad creo que escribo esto para ordenar mis ideas.. o mis sentimientos, aunque creo que mis sentimientos son difíciles de ordenar.
No hay nada que me importe demasiado como para estar segura de que no quiero dejarlo marchar o estropearlo, que quiero cuidarlo, que lo quiero para mí.. que va, no lo hay.. ni tampoco existe algo que me importe demasiado poco como para que si se marcha y me deja no sienta nada, no sienta ni siquiera un pequeño vacío. Quizás sea también inseguridad, de hecho, más que inseguridad, yo diría miedo. Miedo. Aunque me cueste admitirlo tengo miedo a que alguien me falle o a que mis ilusiones caigan en picado cuando se encontraban en lo más alto. Es que.. ¿sabéis?, eso duele.
Entonces lo veo normal. Hombre, a nadie le gusta sufrir y que algo duela tanto que crees que nunca serás capaz de curar esa herida, porque ya sabemos todos que las heridas del corazón son las más difíciles de curar y las que más tarde cicatrizan.
Yo a veces lo pienso y bueno, creo que en realidad no pido tanto. Los demás tienen cada uno su vida, sus historias.. y todos son felices, o al menos eso parece. Parece que tienen lo que quieren, que no necesitan más y entonces yo me pregunto..¿tan diferente soy? Lo digo porque lo que ellos tienen es lo que yo anhelo, una cosa simple: la felicidad. También podría pensar que ellos no tienen muchas cosas que tengo yo, etc, etc.. pero, eso no me da soluciones.
Creo que merezco un pequeño cambio en mi vida. Algo que me de nuevas sensaciones y experiencias. Algo con lo que no tenga que pensar en nada más... no sé, algo que me haga sentir especial en cada instante. Quizás sería más justo sustituir ese ''algo'' por ''alguien''.. sí, mucho mejor. Alguien. Alguien como tú, por ejemplo... pero, ¿quién eres tú? Es lo único que me queda por averiguar.