Paso a paso

Quiero irme a un lugar lejos. A kilómetros de todo lo que aquí ocurre y de todos los que son los protagonistas de estas historias.
Quiero escapar, no huir. Escapar de cientos de calles repletas de problemas para irme a una ciudad desconocida y lleno de nuevas emociones.
Quiero viajar, descubrir, darme cuenta de que la vida de aquí no lo es todo.
Fotografiar cada nuevo rincón que nadie conoce, pudiendo así recordarlo durante mucho más tiempo.
Pasear entre gente que no conozco, ver caras desconocidas y no preocuparme por lo que puedan pensar o lo que pretendan hacer.
Sonreír al ver que la luna está cada noche donde esperaba encontrarla y que al aire sigue acariciando mi cara esté donde esté.
Poner canción a cada nuevo sentimiento y bailar, bailar hasta que no pueda más... hasta que mis piernas digan: basta.
Darme cuenta por fin que no por estar en otro lugar el sol amanece de diferente manera, entender que hay mucho por descubrir todavía y demostrar de una vez que los problemas se quedan donde yo los deje.

Armadura

Siempre es buen momento para equivocarse, siempre encontramos momento para arrepentirnos y algún instante en el que sufrimos nuestros errores o nuestras oportunidades perdidas.

Todo esto lo cuento porque soy toda una experta. Soy experta en equivocarme, sé arrepentirme y se me da muy bien sufrir por mis propios errores. Si me conocierais incluso os daríais cuenta de que soy la número uno en la pérdida de oportunidades. No os querríais parecer a mi. Yo tampoco.

Caigo, vuelvo a caer, y otra vez más... desde lo más alto. Aunque bueno, si pudiera enseñaros mis errores en una gráfica sería una línea constante, ya que no tengo ni siquiera la oportunidad de volver a levantarme antes de volver a lo más bajo.

Me machacaba a mi misma por haberme convertido en una persona tan desconfiada. Me inundaba la indecisión de dar un voto de confianza o seguir protegiéndome con la armadura que me había acompañado durante tanto tiempo.

Y como me suele pasar me equivoqué al tomar la decisión. Fallé, dejé de estar a la defensiva y pagué por la decisión tomada. Todo tiene sus respectivas consecuencias.

Ahora lo único que me ronda por la cabeza día y noche es: ¿Por qué a mi? ¿Por qué siempre soy yo?, no sé la respuesta, o sí.. no estoy segura. Lo único que sé con certeza es que soy yo la que está pagando y soy yo la que se a vuelto a tropezar, esta vez cayéndome desde lo más alto... desde lo más alto.

No tengo fuerzas para volverme a levantar, pero tampoco lo veo necesario.. prefiero que la próxima vez ya me pille en el suelo, así quizás no duela tanto.

Quizás sea el momento

Todo el mundo dice siempre la típica frase: ''Quien no arriesga no gana'', '' El que no arriesga no gana'', bla bla bla...
Pues hace algunos días que esa frase está constantemente dando vueltas por mi cabeza, aunque yo ni voy a arriesgar, ni voy a ganar.. o perder.
Quiero aplicártela a ti: arriesga. Arriesga porque no vas a perder... todo lo contrario. De hecho, puedes ganar mucho... tanto tú, como yo. Actúa por los dos, piensa en lo que nos queda.. o no sé, descubrámoslo caminando, porque aquí parados no vamos a ver mucho.
Solo lo sabremos viviendo.. vamos a vivir.

Así de simple

¿Sabes? 

Soy simple, sobre todo a tu lado. Pequeña cuando tus ojos me abrazan. Sencilla, natural y equilibrada, aunque a veces pierda la cabeza y ría hasta no poder más. Con esto te digo también que soy alegre. Conformista, pero ambiciosa. Me gusta conseguir todo lo que me propongo... Eso de dejar las cosas a medias no va conmigo. No me importa andar por caminos dificultosos si al final encuentro lo que busco. Andaría miles de esos caminos por encontrarme contigo al final. 

Soy inocente y lista cuando me apetece. Inteligente no estoy segura, bueno, es relativo ¿no? Todo lo es, pero si me lo pides.. no dudaría en serlo.

Se bailar... hasta el amanecer. Canto. Mal, pero canto. Soy directa cuando lo necesito, aunque a veces intento escapar al tener miedo de la respuesta. Soy y me pongo nerviosa. Muchas veces. 

No paro. Me gusta descubrir.. descubrirte. Puedo ser lo que pides. Todas y cada una de las cosas que pides las sería yo... las sería por ti. Pide y punto.

Lo principal

SOY FELIZ.
Y os preguntaréis: ¿Una entrada de blog solo para poner esa frase? Pues sí, porque ser feliz es lo más importante que hay en esta vida. La felicidad se consigue a través de muchos caminos... Quizás el más adecuado sea el del amor. Adecuado y arriesgado, pero, ¿A qué hay que temer?

Suele ocurrir... creo.

En realidad no hay mucha cosa que contar.

Bueno, sí la hay, para qué mentirnos, ¿no? Ya hay confianza entre nosotros: yo me ocupo de contar cada detalle de mi vida y vosotros de vez en cuando os encargáis de leerlo y disfrutar.. o no. Bueno, que más da. 

El caso es que son tantas cosas.. Que da pereza y a la misma vez ganas de escupir todo lo que llevo dentro, pero es tan difícil. Sí, porque en poco tiempo y sin quererlo han pasado muchas cosas que no tienen ninguna conexión. Todo es absurdo, pero no hay nada que no sea importante. Cada detalle de nuestra vida ayuda al transcurso de las cosas, a que nuestro camino vaya tomando dirección. Son hechos diferentes y difíciles de enlazar. Quizás, el único nexo que hay entre todas soy yo. Es lo más seguro, aunque prefiero no pararme a analizarlo. Bueno, tampoco hay que ser mago para adivinar lo que tienen en común todas esas historias. Tengo que ser yo, simplemente porque soy la única protagonista de cada hecho. Protagonista o culpable.. cada uno que lo llame como quiera, lo de denominar es lo que menos me preocupa ahora mismo.