Por ti, por mi, por nosotros.

Cuando el olor a sal impregna cada esquina de nuestra ciudad preferida. Cuando el sol se despide tarde, sin ganas de irse. Cuando la luna nos saluda con su brillo reflejándose en el mar. Cuando el moreno de tu piel me enreda entre tus brazos y la suave y leve brisa despeina tu pelo.. en ese momento mis ojos no quieren apartarse de ti.

Cuando con una sonrisa puedes decir más de lo que nadie ha esperado nunca. Cuando tus ojos brillan.. no sé si de ilusión o de alegría. Cuando tus manos acarician el mapa de mi cuerpo, realizando cada línea perfectamente como si de memoria te lo supieras.. en ese momento no se escucha más que el silencio de nuestras palabras.

Cuando esos paseos de olor a dama de noche nos envuelven en abrazos interminables. Cuando tus besos saben dulces, salados, fríos o calientes... entonces, en ese momento cada una de las personas de nuestro alrededor desearía ser nosotros.

Y aunque tus palabras roben las mías y no tenga más que decir que lo que expresan mis ojos. Aunque mi sonrisa  no sea lo más bonito que has visto.. es tuyo. Todo. Es tuyo cada lunar de mi cuerpo, cada curva o cada cicatriz. Te pertenecen a ti, a tus locuras sigilosamente delicadas. A tus manos. A tus labios. 

A ti, a ti, a ti, a ti...