Llévame al baile

Sigo aquí aunque a veces lo dudes, aunque a veces no me veas... ya ves, hay cosas que se sienten y sin embargo somos incapaces de percibir por los sentidos.

Las mentiras no tienen edad

Qué triste y duro fingir, sobre todo cuando te sientes obligada a hacerlo, porque... ¿ qué se supone que tenía que hacer? Pues eso... obligada.

Me costaba sonreír y menos mal que tú no pudiste notarlo, porque sino ni fingir hubiera sido suficiente.

Sin ganas de crecer

El tiempo pasa. Unas cosas llegan, pero las más importantes se van. Todo lo vivido, todo lo soñado, todas las cosas que jamás quisiste olvidar se van... de un soplo. 

Se van tantas y tantas personas que eran para ti todo. Se van esas personas que te han ayudado a crecer, a madurar, a construir recuerdos que pase el tiempo que pase, no olvidarás.

¿Qué por qué se van? Porque así está escrito.

Llega un momento en nuestras vidas en el que tenemos que empezar una nueva etapa, y eso no me gusta. No me gusta dejar atrás todo lo que quiero. Sinceramente, no me gusta que las personas a las que quiero se marchen de mi lado.

Nos hemos visto crecer y ahora cuando os miro, veo que la vida pasa, pero veo también que todos los lugares que han acompañado nuestras historias nos seguirán acompañando el resto de los días.

Recuerdo cada detalle de nuestros momentos juntos. Esos días de playa, de paseo o de fiesta. Cada día era especial.

Todavía quedan esas canciones que nos unen, esas palabras que todos conocemos o esos momentos que recordaremos solo con mirarnos.

Siempre es siempre.