martes, 20 de septiembre de 2011

Ya huele a otoño

Las calles de mi,
Ahora, 
tranquila ciudad,
Se cubren con un manto de hojas.
Los árboles se desnudan gritando a voces que todo empieza…
…O que todo acaba.
La tez morena contrasta con las nubes que,
Por capricho,
Cubren el sol que tantas horas nos acompañó incansable.
Despierta la brisa fresca que nos susurra al oído:
‘Ya huele a otoño’
Se doblan las vidas que madrugan,
Y las que no trasnochan.
Primeros esfuerzos.
Primeros objetivos.
Se abre el cajón famoso que todos tenemos
Y decidimos guardar los recuerdos de la estación que se marcha.
Compramos cuadernos nuevos en oferta,
Ya sabéis, ‘Vuelta al Cole, 2x1’,
Y empezamos a escribir lo que comienza.
Pequeño resumen de lo que acaba.
Y deseos de poder tener,
En aquellos días que quedan por llegar,
Algún minuto de tiempo fuera de la normalidad establecida
Para dedicarlo a nuestro nuevo almacén de recuerdos.
Primeras camisas de mangas largas,
Satisfacción porque los vaqueros no dan calor
Y enormes ilusiones porque llegue la gran estación,
La estación aclamada por los mortales
Y mortalitos, sobre todo,
Que esperan ver llover caramelos un día de cabalgatas
O ver como un árbol tiene como fruto todo aquello que escribieron en una carta.
Los demás esperamos...
Y esperamos…
Y volvemos a esperar,
Pensando,
E incluso convenciéndonos de que lo que vendrá será mejor.
Nadie atiende a lo bonito,
Porque la verdadera belleza tiene que ser analizada detenidamente y…
Supuestamente,
Nunca hay tiempo.
Nadie se para en un Octubre ajetreado a mirar a los árboles,
A escuchar lo que dice el viento
O sentir el crujir de las hojas.
'Estamos demasiado ocupados', pensamos.
'No tenemos tiempo', creemos.
Y cuando abrimos los ojos una mañana de domingo,
Nos enteramos que quedan dos semanas para asar el pavo en el horno de los abuelos.
Hoy me atreveré a realizar la escrupulosa tarea de aconsejar,
Si pudiera os diría:
Mirad por las ventanas,
Salid a las calles,
Pasead junto al frío mar,
Disfrutad de un café en una terraza…
Pararos en mitad de la vida
Y pensad por unos instantes en el lugar en el que estáis,
Porque así os daréis cuenta de todo lo recorrido
Y, sobre todo,
De lo que aún queda por llegar.
Os saldrá el orgullo por los poros
Al descubrir lo valientes que habéis sido durante lo que lleváis de vida.
A mí me gusta el otoño, me encanta,
Adoro la primavera, mucho,
Y es que tienen secretos que nadie logra descubrir.
Es la transición,
Y lo importante no es el destino, sino el viaje.
Por eso os recomiendo que observéis el otoño,
Disfrutéis de sus secretos
Y esperéis con tranquilidad lo que vendrá.
Es cierto que el tiempo no espera a nadie,
Pero os podéis permitir un alto en el camino para observar lo que el tiempo os regala.

martes, 13 de septiembre de 2011

No temo lo equivocado

No me llames princesa si no has vivido conmigo ningún cuento.
No esperes a que te busque, porque los que esperan desesperan,
Y desesperarás en mi ausencia.
Intenta sorprenderme si quieres, pero solo de vez en cuando…
Porque lo que es maravilloso deja de serlo si lo repites muchas veces.
Duérmete sin desearme buenas noches
Hasta que estés convencido de que quieres soñar conmigo.
Invítame a un café, pero no más de dos veces.
A la tercera va la vencida, y no te quiero vencer.
Olvida que te escribo cuando llega la primavera, 
Y que siempre espero que me contestes diciendo:
''Eres la flor más bonita de todas las primaveras que se pueden vivir'' 
Olvídalo.
Aprende a conquistar antes de intentarlo conmigo.
No soporto ser objeto de prueba.
No intentes enseñarme a quererte si no te lo pido.
No me enseñes a llorar.
No me enseñes a sufrir.
Prefiero aprender cuando te hayas ido.
Déjame que te cuente cuentos que me he inventado,
Y escribe conmigo el final que se merece cada uno.
Duérmeme entre tus brazos
Y llámame Bella Durmiente cuando me despiertes con un beso.
Enfádate si me lo merezco,
Pero perdona rápido, porque estar sin ti duele.
Dime que me quieres.
Y ríete cuando me ruborice nada más por tenerte a mi lado.
Será genial poder decirte lo que pienso,
Sí, sin tener miedo de perderte por ello.
Será genial que me lleves a pasear,
Y me cojas de la mano
Y me hagas reír hasta tener argumentos para llamarte tonto.
Será genial que me lleves a bailar como en las pelis antiguas,
Aunque nuestra historia tenga mucho más color que todas esas películas en blanco y negro.
Será genial que no hagas caso a todo lo que te pido…
Porque lo mejor de todo será que me quieras,
Pero a tu manera.
Es la forma que más me gusta.
Y es que todo lo procedente de ti tiene que ser bonito
Y genial
Y perfecto.
Lo maravilloso de la vida es que cada cual
Merece lo que tiene.
Y tiene lo que merece.
No estoy segura de si tú…
Y yo estamos dentro de ese grupo de vida maravillosa.
Porque la nuestra no es maravillosa, no,
Es mejor.
Y a tu lado, única.